¿NECESITA MI HIJO UN PSICÓLOGO?

¿CUANDO LLEVAR A MI HIJO A UN PSICÓLOGO?

El desarrollo infantil es un proceso complejo y variable y como se suele decir, los niños no vienen con un manual de instrucciones al nacer.

El contexto familiar es el primero en el que el niño se desarrolla y aprende a relacionarse, así los padres tienen la misión de hacerlo lo mejor que puedan, y en la mayoría de los casos los padres dan lo mejor de sí mismos;  pero a veces las cosas no son fáciles y surgen los problemas, algunas veces son visibles e identificables y no se duda de que algo pasa, pero en otras ocasiones no es tan sencillo detectar que un niño tiene un conflicto o que está sufriendo.

Así, como decimos a veces no es fácil saber si un niño tiene un problema o son cosas de la edad, y más difícil aún es  la decisión de llevar a un niño al psicólogo infantil para salir de dudas. Existen muchas razones, aunque poco razonables, para no llevar a un niño al psicólogo infantil: el desconocimiento sobre si lo que hace el niño es normal o no, miedo a que el psicólogo culpe a los padres, miedo al que dirán, miedo al que el niño se sienta diferente por ir al psicólogo, etc. Pero la decisión de llevar a un niño a un psicólogo infantil  como nuestros psicólogos del escorial y Guadarrama debe ser tan natural como la que guía a un adulto, es decir, el malestar y sufrimiento de la persona y la falta de capacidad para solucionar ese sufrimiento por sí mismo y en caso, también por la familia.

Los padres y la escuela son usualmente los primeros en reconocer cuando un niño tiene un problema emocional o de comportamiento, pero  la decisión de buscar ayuda profesional puede ser difícil. Uno se resiste, quizás porqué considera que no le van a decir nada nuevo o en caso de hacerlo será cómo poner en entredicho sus capacidades. Sin embargo, pedir ayuda  a un profesional como nuestros psicólogos de El escorial y Guadarrama es una actitud madura y  puede ser de gran utilidad porque permite compartir el problema con un profesional que oriente a la familia y sirva de apoyo, ya que en la mayoría de ocasiones los problemas infantiles genera un gran desgaste emocional, físico y de la interacción padres-hijos.

Además, se debe tener en cuenta que los niños son más vulnerables que los adultos y la ayuda de un terapeuta infantil  como nuestros psicólogos infantiles de El escorial y Guadarrama puede ser muy útil. Algunos motivos para llevar a un niño a un psicoterapeuta infantil son los siguientes:

  • Tienen una percepción del mundo diferente según la etapa evolutiva que es importante tener en cuenta.
  • Tiene menos capacidad para reconocer sus emociones y estados mentales.
  • Tienen menor capacidad para pedir ayuda.
  • Tienen menos recursos para enfrentarse a los problemas.
  • La detección e intervención temprana previene futuros problemas.

 

¿COMO DETECTO SI MI HIJO PUEDE TENER UN PROBLEMA?

Es frecuente que los padres no sepan o duden si la conducta del niño es propia de la edad y cambiará según vaya creciendo o si realmente es una conducta problemática, esto es un criterio muy subjetivo pero hay situaciones que, en general, pueden indicar la necesidad de acudir a un psicólogo infantil como nuestros psicólogos del Escorial y Guadarrama:

  • Cambios en el comportamiento.
  • Disminución del rendimiento escolar.
  • Rabietas y explosiones.
  • Falta de energía y motivación.
  • Menor interés por el juego y por sus compañeros y amigos.
  • Menor disfrute de las actividades lúdicas.
  • Miedos, ansiedad, pesadillas.
  • Síntomas corporales.
  • Cambios en los patrones de alimentación y/o sueño.

 

Es importante apuntar que los niños al igual que los adultos sufren en algún momento de sus vidas o se enfrentan a problemas y hay que tener en cuenta que se debe considerar un problema relevante cuando:

  • La conducta no es adecuada para el nivel de desarrollo del niño por ejemplo, rabietas con edades avanzadas, orinarse en la cama después de aprender a controlar el esfínter, etc.
  • La frecuencia e intensidad de las conductas es excesiva. Se da casi todos los días o muchas veces.
  • Se prolonga mucho en el tiempo.
  • La vida del niño o de la familia se ve interferida por los problemas, dificultades o sufrimiento del niño. Por ejemplo, faltar a clase, no salir de casa, miedos, etc.

 

¿TIENEN LOS MISMOS SÍNTOMAS LOS NIÑOS QUE LOS ADULTOS?

A veces las personas se preguntan si los problemas psicológicos infantiles se expresan de la misma manera que en los adultos. En algunos aspectos la sintomatología es la misma que en los adultos, pero hay aspectos que si difieren entre los niños y adultos y es importante tener en cuenta para poder detectarlos. En concreto, se tiene en cuenta dentro de la psicoterapia infantil algunos aspectos específicos de los problemas infantiles como por ejemplo:

  • Los niños con sintomatología depresiva pueden expresarla a través de la desmotivación y la apatía como los adultos, pero también pueden expresarla a través de explosiones y rabietas inesperadas.
  • Los niños con miedos irracionales pueden no reconocer que su miedo es irracional y pensar que son muy lógicos. Esto no suele pasar en los adultos, que suelen reconocer que su miedo es excesivo e irracional como por ejemplo, el miedo a subir en un autobús. Esto hace que al niño le cuesta más tomar conciencia de que lo que le genera malestar.
  • Los niños que han sufrido experiencias traumáticas pueden revivir los síntomas como un adulto, es decir a través de pesadillas, flashback, sensaciones de revivir el momento, etc. pero es común que los niños también expresen el trauma a través del juego, repitiendo la situación o situaciones parecidas.

  

¿CUALES SON LOS PROBLEMAS MAS FRECUENTES EN LA INFANCIA?

Hay trastornos que son más frecuentes que aparezcan en la infancia, otros en la adolescencia y otros en la edad adulta. No obstante, en la infancia pueden aparecer los problemas de los adolescentes o adultos como la depresión, la ansiedad, el estrés postraumático, etc. aunque sean más característicos de otros periodos.

Los problemas que  más frecuentemente aparecen en la infancia son:

  • Trastornos del espectro autista
  • Discapacidad intelectual
  • Miedos y fobias
  • Adquisición de hábitos erróneos: alimentación, sueño, esfínter, etc.
  • Problemas en las relaciones sociales
  • Problemas de conducta ( rabietas, explosiones, incumplimiento de las normas)
  • Problemas de aprendizaje
  • Problemas del lenguaje y la comunicación
  • TDAH

Si crees que tu hijo necesitas un psicólogo infantil nuestros psicólogos del escorial y Guadarrama pueden ayudarte, no dudes en contactar.

Toda la información en www.vgbpsicologos.com